Descripción
La Aloe Vera es una planta suculenta, que se ha popularizado en todo el mundo por sus propiedades curativas y cosméticas. Es una planta perenne que se cultiva tanto en exteriores como en interiores y puede alcanzar una altura de 60 a 90 cm. Para plantar Aloe Vera, es importante elegir una maceta con buen drenaje o un área del jardín que tenga un buen drenaje y esté expuesta a la luz solar directa o parcial. La Aloe Vera prefiere suelos arenosos y bien drenados, por lo que es fundamental mezclar el suelo con arena gruesa y materia orgánica para mejorar la textura y el drenaje. Es resistente a la sequía y, por lo tanto, no necesita agua frecuente. Sin embargo, no dejar que la tierra se seque completamente. Se recomienda regar la planta solo cuando el suelo está completamente seco. Es crucial evitar el exceso de riego, ya que el exceso de humedad puede causar pudrición de la raíz y matar la planta. La Aloe Vera es una planta resistente y fácil de cuidar. Sin embargo, tener en cuenta que las hojas contienen una savia amarilla que puede ser irritante para la piel y los ojos. Por lo tanto, manipular la planta con cuidado y mantenerla fuera del alcance de los niños y las mascotas.
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